Pichihua, es uno
de los pueblos de la región Apurímac que, desde hace varios años atrás, le
están dando real importancia al agua, fuente de vida y seguridad alimentaria
para la población.
Han realizado proyectos de protección
de manantes, limpieza del río en el mes de agosto, el Yaku Tinkay, el Qocha
Wichqay y pronto ejecutarán el proyecto de recarga hídrica con Agro Rural y
reforestarán con plantas nativas para la siembra y cosecha del agua.
Con la ONG GeoYachaq están gestionando ante el Ministerio del Ambiente el reconocimiento como Área de Conservación Comunal la biodiversidad de la cabecera de cuenca del río Pichirhua, entre otras acciones de conservación del agua pensando en las futuras generaciones.
El acto protocolar
Como ya es costumbre en el pueblo de
Pichirhua, por el Día Mundial del Agua, en el sector de Peras Pukyu de la
capital distrital de Pichirhua, el carguyuq del presente año organizó el “Yaku
Tinkay”, una de las costumbres arraigadas en el pueblo desde tiempos
inmemoriales.
Participaron la comisión de usuarios
de agua, la junta de usuarios de agua, las instituciones educativas de nivel
inicial, primaria y secundaria, las autoridades distritales y comunales,
vecinos y comuneros, la Asociación Cultural “Pachakuyaq Ayllu y el Colectivo
Cultural “Los Hijos de la Mamapacha”.
La ceremonia protocolar inició en la plaza de Pichirhua, con el izamiento del pabellón nacional, las palabras del presidente de la comisión de regantes, la participación de los estudiantes con poesías y canciones alusivas al agua, finalmente, alrededor de la plaza y en el recorrido hacia Peras Pukyu n se realizó la marcha de sensibilización con frases y arengas alusivas en defensa de la Mamapacha y el cuidado del agua.
La ceremonia Ritual
La ofrenda ritual al agua se realizó
en el sector de Peras Pukyu estuvo cargo de los Yachaq Gilbert Bravo y Genaro
Cahuana, acompañado por hermanos visitantes del Movimiento Cultural Pachakuyaq
Ayllu y el Colectivo Hijos de la Mamapacha.
Los Yachaq explicaron a los presentes
que el agua desde el mundo occidental es considerada simplemente un recurso,
los citadinos, es decir la gran mayoría que vive en la ciudad, lo considera
como un servicio, en cambio nosotros los andinos lo consideramos un ser vivo,
una persona y parte de nuestro ayllu.
Precisaron que el agua es a la vez
padre y madre de nosotros los runas, por esto nos cría, nos cuida y por esto,
los humanos como sus hijos, a través del “Hawarikuy” u ofrenda ritual, le
agradecemos por todo o que nos da, le damos fuerza, energía y vitalidad.
Acotaron, que el agua, a aparte de
ser un ser vivo, es sagrado, es el origen de la vida, es garantía del bien
común, en síntesis, es el medio para para la generación del Allin Kawsay.
La yunza y el Pukllay Takiy
La ofrenda de agradecimiento al agua
en la comunidad de Pichirhua culminó como de costumbre con una Yunzada
organizado por los carguyuq, en el que, con mucha algarabía y alegría los
participantes bailaron y cantaron al son del conjunto magisterial y el grupo
musical originario compuesto exclusivamente de tinyas, quenas y las voces
melodiosas del Pukllay Takiy de las mujeres pichirhuinas.
El cargo del próximo año 2024 ha
recaído en el representante de la Cooperativa “Los Andes” con sede en
Casinchihua-Pichirhua y la señora Liliana Sauñe Pantigoso, quienes junto a las
autoridades se han comprometido a seguir fortaleciendo el tradicional “Yaku
tinkay”, como un legado de nuestros ancestros y para generar conciencia de
cuidado del agua y de la Madre Tierra Tomado de SERVINDI