sábado, 28 de marzo de 2015

EXTERMINIO SILENCIOSO A UNA NACION INDIGENA EN COLOMBIA


Como los medios de comunicación corporativos tienen sus prioridades informativas bien definidas y orientadas, especialmente contra Cuba, Venezuela u otros países que no se subordinan a Occidente; usted no sabrá que la nación indígena Wayúu [1], la mayor de Colombia, se muere de hambre y sed porque el río madre de la región donde radican fue represado y su agua privatizada para el servicio de la industria agrícola y la explotación de la mina de carbón -a cielo abierto- más grande del mundo.  Por esa misma razón, ignorará, seguramente, la denuncia que esta comunidad ha presentado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos -CIDH-, de la OEA, con sede en Washington, por la violación de sus derechos vitales fundamentales.

Los datos que existen del crimen que se comete contra la etnia Wayúu no son precisos, informa la web las dos orillas.com. Según esta fuente, en el extenso territorio que ocupan en el extremo Norte del país sudamericano, la nación de origen prehispánico carece de controles y presencia estatal colombiana.  En cualquier caso, según Armando Valbuena, autoridad tradicional Wayúu, unos 14 mil niños de la etnia han muerto de inanición y la mortandad no se detiene.
    A todo esto hay que agregar que la escasa ayuda que el gobierno colombiano los Wayúu no llega a los indígenas.  El caso del Programa de Alimentación y Nutrición, en el que se invierten más 15 millones de dólarez, es un ejemplo.  Buena parte de ese dinero - denuncian los voceros de Wayúu Armando Valbuena y Javier Rojas Uriana- se queda en redes de corrupción y termina siendo utilizado en las campañas políticas para la compra de votos.  Téngase en cuenta, además, que La Guajira posee una población de 500 mil habitantes y ha recibido, durante los últimos 20 años, más de mil millones de dólares por la extracción de sus recursos naturales (carbón y gas), además del dinero que le corresponde cada año del presupuesto nacional.  Pero ese dinero es robado por la corrupción que domina las administraciones públicas locales.
    En medio de ese panorama, en febrero de este año cinco autoridades tradicionales indígenas, a través de su representante legal Javier Rojas Uriana, solicitaban a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que dictase medidas cautelares urgentes que les permitan recuperar el uso del único río que poseen para detener la actual mortandad por inanición de niños y adultos mayores.  La acción pretende que el organismo interamericano ordene la apertura inmediata de las compuertas que restringen el paso del agua del río Ranchería, que es acumulada en la represa El Cercado.
    Según la abogada Sáchica Moreno, del Consultorio Jurídico de la Universidad de Bogotá, el agua del río, un bien público, fue privatizado y la primera consecuencia de ello es el proceso de exterminio en que se encuentra esta etnia colombiana, sumida en la miseria y el abandono.
    La cruda realidad para estos seres humanos es que la mayor parte del río quedó completamente seco, pues su caudal hoy está destinado exclusivamente a grandes haciendas del sur de La Guajira y a las operaciones industriales de las minas de carbón de Cerrejón.
   De acuerdo a la solicitud presentada ante la CIDH, la legislación internacional y nacional, y a estudios de la Defensoría del Pueblo y la Contraloría General de la República de Colombia, los primeros destinatarios del agua deben ser siemprelos seres humanos.  Solamente después de que ellos la tengan garantizada a satisfacción, los excedentes que resulten pueden ser usados en menesteres agrícolas, industriales y otros.
    Por otra parte, además de pedir la apertura inmediata de las compuertas de la represa para que el agua llegue cuanto antes a los indígenas, se pide que se ordene suspender de manera inmediata las tomas de agua de La Guajira que Cerrejón obtiene de otras fuentes públicas distintas al río, principalmente subterráneas, hasta que una evaluación técnica idónea e imparcial determine si, después de abastecer satisfactoriamente a los seres humanos en la región, quedan excedentes de agua para destinarlos a la agricultura a gran escala y a la explotación de las minas.
   Finalmente, del conjunto de pruebas judiciales que serán presentadas a la Comisión se destaca el documental inédito que acaba de terminar el periodista colombiano Gonzalo Guillén, "El río que se robaron", donde se testimonian los hechos denunciados a través de imágenes sobrecogedoras de La Guajira y declaraciones de los protagonistas.
   [1] El Nobel de literatura colombiano Gabriel García Márquez tuvo linaje Wayúu por parte de madre y la influencia de esa cultura está presente en una buena parte de su obra.
Tomado de Canarias-Semanal.org
Por Juan Andrés Pérez


   




  




   


  




   [1] El Nobel de literatura colombiano Gabriel García Márquez tuvo linaje Wayúu por parte de madre y la influencia de esa cultura está presente en una buena parte de su obra.




VÍDEO RELACIONADO:






  



  



   






  

sábado, 21 de marzo de 2015

MOVILIZACION NACIONAL POR LOS DERECHOS DE LA POBLACION INDIGENA DEL BRAZIL

POR QUE ASESINARON AL ALCALDE INDIGENA DE MARA APURIMAC PERU


  Miles de campesinos
¿Fueron sus enemigos políticos que nunca perdonaron que por primera vez gane en una justa electoral un indígena de ojota y poncho en el distrito de Mara? ¿Fueron los poderes oscuros que se están enraizando en Cotabambas y que no quieren que alguien defienda su territorio como lo hacía por convicción el electo alcalde? ¿Es producto del racismo que todavía campea en Cotabambas? ¿Quisieron asaltarlo, pero qué dinero? Sea lo que sea, tiene que haber justicia dicen los miles de hombres y mujeres humildes, campesinos y quechua hablantes que confiaron en él en las últimas elecciones electorales de 2014.
Se trata del joven alcalde distrital Alberto Roque Cconislla (35) quién por su dinamismo y liderazgo en su comunidad de Yuricancha incluso se ganó el apelativo de segundo “Ñiñucha”, comprometido con las causas justas y el desarrollo de las comunidades campesinas.  Tenía una empatía especial con los jóvenes indígenas de la zona con quienes estaban ya forjando una escuela de formación de líderes, con proyectos sociales en mente en educación y salud para sus hermanos del campo. Había logrado en estos dos primeros meses contactar con ministros, congresistas, oenegés y profesionales que lo ayudarían a colocar las primeras piedras de cambio verdadero del distrito de Mara.
Los que le conocimos nos enlutamos, nos dolemos; un manto de inmensa tristeza cubre nuestros corazones, pero también sentimos rabia e indignación contra aquellos malditos que lo asesinaron. Sabemos que se tejerán muchas versiones para querer tapar este crimen; pero la realidad es única, todavía la vida de un indígena no vale nada, peor aún para éste sistema que está plagado de poderes fácticos, de intereses oscuros, de corrupción.  ¿Cómo les incomodaba las palabras en quechua cuando Alberto Roque se dirigía a la población clara y directamente en defensa de las comunidades campesinas? Ya se perfilaba como un gran potencial político a nivel de toda la provincia. No les quedó otra cosa a estas mentes asesinas que callarlo para siempre. Pero sabemos que Alberto Roque Cconislla será aún más la semilla de la reivindicación de los indígenas del Perú Profundo.

Primera Dama Nadine Heredia en comunidad de Yuricancha
¿Ustedes conocen a la primera comunidad saludable de Apurímac a dónde llegó el año pasado Nadine Heredia en el Día Mundial de la Alimentación? ¿Conocen la comunidad que aún preserva más de 50 variedades de papa nativa y que se disfrutan  en  los restaurantes de Gastón Acurio? ¿Conocen ustedes a la comunidad mejor organizada de la provincia de Cotabambas? Es la comunidad de Yuricancha de donde procedía  Alberto Roque, donde junto a sus hermanos comuneros puso su sacrificio, sudor y tiempo para que obtenga tal distinción dicha comunidad. A esos hombres de bien se están acostumbrado a asesinarlos. El año pasado asesinaron a “Machu Pucara” padre del conocido profesor “Yaku” lo  cual quedó en la impunidad.  Esta nueva muerte no quedará impune. Exigiremos hasta que sepa la verdad y se haga justicia, dicen los cotabambinos. Veremos cómo actuarán las autoridades correspondientes.
El distrito de Mara se ubica en la provincia de Cotabambas, región Apurímac
La ruta Challhuahuacho, Mara, Qapaqmarca y Qoyabamba se está convirtiendo en la “Ruta del Terror”. Ante éste hecho las autoridades tienen que investigar y los cotabambinos sobre todo los mareños tienen que estar más unidos que nunca.
Mi profunda solidaridad con la familia de don Alberto y con las comunidades campesinas del distrito de Mara a quienes les tengo un profundo respeto y admiración por su constante lucha e inquebrantable fuerza combativa para sobreponerse a las vicisitudes de la vida.n ¡Descansa en paz! Alberto Roque Cconislla, líder indígena que perdurarás para siempre en nuestros corazones.   Articulo de Wilman Caichihua Robles  Tomado de SERVINDI

COMUNICACION INTERCULTURAL POR DEFENSA DE LA PACHAMAMA

Con el fin de fortalecer los espacios de articulación y el trabajo en red de comunicadores, voceros y voceras indígenas y periodistas ambientales, se llevará a cabo en el Perú cuatro encuentros descentralizados y una Jornada Nacional en Lima.   Los encuentros denominados: Comunicación intercultural para la defensa de la Madre Tierra, priorizarán la capacitación en temas de vital importancia de la agenda indígena como identidad, territorio, ambiente y cambio climático.
Asimismo, promoverán entre sus participantes el desarrollo de habilidades, competencias y destrezas en el manejo de herramientas de comunicación con enfoque intercultural y de género.  Entre sus objetivos específicos también está generar un espacio de diálogo e intercambio de saberes y experiencias entre comunicadores, voceros y voceras indígenas para fortalecer la capacidad de incidencia articulada.
La organización está a cargo del Comité Promotor de la Escuela Itinerante de Comunicación Indígena e Intercultural del Perú (EICIP) que aprovechará el evento para validar una metodología de formación.  Los eventos cuentan con el auspicio de la agencia de Cooperación Alemana (GIZ), el Grupo Internacional de Trabajo sobre Asuntos Indígenas (IWGIA, por su sigla en inglés), la Fundación Ford y Naciones Unidas.

Cronograma y participación

El cronograma es el siguiente: en Huancayo, el 9 y 10 de abril; en Cajamarca, el 14 y 15 de mayo; en Puno, el 18 y 19 de junio; y en Pucallpa, el 17 y 18 de setiembre.  Como en años anteriores, en agosto tendrá lugar en Lima la III Jornada Nacional de Comunicación y Democracia, los días 13, 14 y 15 de agosto.
Se espera la participación en todos estos encuentros de comunicadores indígenas, periodistas ambientales y líderes voceros y voceras de organizaciones indígenas invitadas. La convocatoria es abierta.
Para inscribirse al taller que corresponde a su región enviar sus datos al correo: secretaria.eicip@gmail.com
Acceda a la ficha de inscripción dando clic en el siguiente enlace:  Ficha de inscripción

El Comité Promotor de la Escuela de Comunicación

El Comité Promotor de la Escuela Itinerante de Comunicación Indígena e Intercultural del Perú (EICIP) está conformado por la Red de Comunicadores Indígenas del Perú (REDCIP), Servindi, la organización nacional de mujeres ONAMIAP, la Facultad de Periodismo de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya (UARM), la Coordinadora Nacional de Radio (CNR) y la Fundación Friedricht Ebert.

Programa del encuentro en Huancayo

  • Jueves 9 de abril
El jueves 9 de abril se iniciará el evento con la presentación del proyecto y avances de la Escuela Itinerante de Comunicación Indígena e Intercultural del Perú a cargo de Servindi.  Luego se socializará la agenda programática de once puntos del Foro por el Derecho a la Comunicación desde la mirada de los pueblos indígenas y una breve introducción a la importancia de gestionar y liderar la comunicación, a cargo de la Coordinadora Nacional de Radio (CNR).
La jornada matinal culminará con el tratamiento de la importancia de la identidad y la auto identificación para la incidencia en políticas públicas, a cargo de ONAMIAP.   Por la tarde se abordará la situación y procesos de afectación a los derechos territoriales de los pueblos y comunidades originarios así como sus desafíos actuales.
La jornada del primer día culminará con el abordaje de la situación ambiental y el cambio climático, a cargo de la Fundación Friedrich Ebert.  En el tratamiento de todos los temas la metodología es realizar una exposición temática, la misma que será seguida de un trabajo de reflexión grupal con el fin de analizar y debatir cómo generar opinión y elaborar mensajes que contribuyan a incidir en los procesos en curso.
  • Viernes 10 de abril
En el segundo día se desarrollará un taller introductorio sobre Gestión estratégica y liderazgo en la comunicación, a cargo de la Facultad de Periodismo de la UARM, Servindi, CNR y ONAMIAP.   Luego se desarrollarán Talleres simultáneos para el empleo de herramientas de comunicación. En particular los formatos radiofónicos, a cargo de la CNR, y herramientas de vocería para la incidencia, a cargo de ONAMIAP.  Por la tarde se realizarán practicas para la vocería y de manera conjunta se producirán contenidos y productos para la incidencia política, conducidos por todo el equipo promotor.  A partir de las 5 de la tarde se realizará el gran foro público: Comunicación intercultural para la defensa de la Madre Tierra con distinguidos especialistas e invitados, y se presentará la publicación: Comunicar el cambio climático en clave intercultural. Manual de capacitación.
INGRESO LIBRE AL FORO

sábado, 7 de marzo de 2015

EL CALENDARIO ORIGINARIO COSMOVISION ANDINA DEL COLLA SUYU BOLIVIA

CALENDARIO ORIGINARIO

Después de muchos años,  la herencia ancestral, de procedencia del HAYA MARA ARU (la lengua del inicio de los tiempos), renace para transmitir a la comunidad la fuerza emergente. Nuestra civilización, la civilización Andina, hace un llamado a toda expresión de vida, para volver a la PACHA.
INTRODUCCIÓN.
Dicen algunos estudiosos que “el calendario es una estructura para comprender la relación entre tiempo y poder ”,  y proponen que cualquier sociedad que quiera tener perspectiva en la historia, debe entender el tiempo, porque todo el desarrollo de una sociedad depende de su calendario. Los abuelos enseñan que los parámetros  que el tiempo brinda, nos permiten percibir  la expresión gradual del Universo.
Nuestros abuelos saben de los ciclos del Universo y los dividen en etapas de 9, 50, 500, 2000 y 4000 años básicamente, pues cada una de estas etapas expresan cambios en el proceso de la historia.
La comprensión de los ciclos de la naturaleza, se expresa en el ser humano en la transición que atraviesa, de la etapa de ser nómada a ser sedentario, en el sentido de empezar a relacionarse con la agricultura, esencialmente. Es donde surge la necesidad de hacer el calendario como una medida de tiempo y de relación con todo el Universo para percibir los ciclos y unirse a ellos.
El calendario que conocemos hoy como universal, es el Calendario Gregoriano, llamado así porque fue promulgado por el Papa Gregorio XIII, después de la conversión de Roma al Cristianismo. Hubo un calendario anterior, que si bien tenía mayor coherencia que este último, fue sometido a una manipulación mayor aún. Se trata del Calendario Juliano, que fue instaurado en honor a Julio César.
Es importante saber que los fundamentos bajo los cuales se pusieron en vigencia estos calendarios (Juliano y Gregoriano), no tenían nada que ver con la exactitud de la observación astronómica, sino más bien con aspectos de carácter político-religiosos, vinculados a la búsqueda de expansión del poder en estos aspectos.
Y es de esta forma que se ha venido construyendo la civilización de Occidente, motivada por los intereses de unos cuantos sectores y por lo tanto, totalmente al margen del entorno. Como si los seres humanos pudiésemos vivir al margen del cosmos, de la naturaleza. En las culturas ancestrales por el contrario, esta relación siempre ha sido tan clara e inherente. Los calendarios ancestrales siempre fueron: luni-solares, solares o lunares, es decir, en relación con la luna y/o con el sol, acompañados por la interrelación con todos los astros, pues éstos constituyen los relojes maestros del universo, en nuestro sistema solar.
Cambiar además con la concepción lineal del tiempo concebida por Occidente, que va de pasado a presente y de presente a futuro. Para el mundo andino el tiempo es circular; por lo tanto en algún momento encontraremos que el futuro está contenido en el pasado.
Entonces la importancia de recuperar el calendario andino, no sólo tiene que ver con algún tipo de reivindicación, sino con la urgencia de volver a unirse al ritmo y a la vibración del universo, que nos permitirá una nueva percepción y expresión de la vida.
ANTECEDENTES
CALENDARIOS ANTIGUOS
Los antiguos babilonios tenían un calendario luni-solar de 12 meses lunares de 30 días cada uno, y añadían meses extras cuando necesitaban mantener el calendario en línea con las estaciones del año. Los antiguos egipcios fueron los primeros en sustituir el calendario lunar por un calendario basado en el año solar. Midieron el año solar como 365 días, divididos en 12 meses de 30 días cada uno, con 5 días extras al final. Hacia el 238 a.C. el rey Tolomeo III ordenó que se añadiera un día extra cada cuatro años, que era por lo tanto similar al moderno año bisiesto. En la antigua Grecia se utilizaba un calendario luni-solar, con un año de 354 días. Los griegos fueron los primeros en intercalar meses extras en el calendario sobre una base científica, añadiendo meses a intervalos específicos en un ciclo de años solares.
CALENDARIO ROMANO
El original calendario romano, introducido hacia el siglo VII a.C., tenía 10 meses con 304 días en un año que comenzaba en marzo. Dos meses más, enero y febrero, fueron añadidos posteriormente en el siglo VII a.C., pero como los meses tenían solamente 29 o 30 días de duración, había que intercalar un mes extra aproximadamente cada segundo año. Los días del mes eran designados por el incómodo método de contar hacia atrás a partir de tres fechas: las calendas, o primeros de mes; los idus, o mediados de mes, que caían el día 13 de ciertos meses y el día 15 de otros; y las nonas, o el noveno día antes de los idus. El calendario romano se hizo enormemente confuso cuando los funcionarios que tenían encomendada la adición de días y meses abusaron de su autoridad para prolongar sus cargos o para adelantar o retrasar elecciones.
CALENDARIO JULIANO
Los antiguos meses de los romanos, eran: 1º,Martius, 2º, Aprilis, 3º,Maius, 4º Junius, 5º, Quintilis,(obsérvese que desde este mes hasta el décimo, el nombre es simplemente el del número de orden que ocupan en el calendario); el 6º, Sextilis, el 7º, September, el 8º, October, el 9º, November y el 10º, December. Más adelante se añadió un undécimo mes, el Februarius, al final del año; por ser éste el último mes del año, se convirtió en el mes sobre el que se hacían los ajustes. Ajustes obviamente no con criterios astronómicos, sino políticos.
Finalmente se adicionó un duodécimo mes, Januarius, que se colocó al principio del año.
Al poner orden Julio César en el calendario el año 45 a.c., asesorado por el astrónomo alejandrino Sosígenes, no se preocupó de recuperar la coherencia léxica para los meses September,October, November y December, que dejaron de ser los meses séptimo, octavo, noveno y décimo, para convertirse en noveno, décimo, undécimo y duodécimo respectivamente. Reemplazó el año lunar de 355 días por un calendario estrictamente solar de 365 días y de 366 días cada cuatro años.
 Este calendario, conocido como calendario juliano, además de establecer el orden de los meses y los días de la semana tal como figuran en los calendarios actuales, modificó el nombre del mes Quintilis por Julius (julio), en honor suyo por ser el mes de su nacimiento.
El año juliano quedó pues con los 12 meses que hoy conocemos, teniendo enero, marzo, mayo, julio, septiembre y noviembre (los meses impares) 31 días, y los demás (los pares) 30, incluido febrero en los años bisiestos.Posteriormente, el mes Sextilis recibió el nuevo nombre de Augustus (agosto) en honor de Augusto, que sucedió a Julio César, sólo que no pudo consentir que el mes de julio (en honor de Julio César) tuviese 31 días, y el mes instituido en su honor, agosto, tuviese sólo 30. Así que deshizo el orden de meses alternos, y le puso también 31 días al mes que llevaba su nombre. Se lo tuvo que quitar a febrero, al que dejó con 28 los años no bisiestos, y 29 los bisiestos.
Algunos expertos mantienen que Augusto estableció la duración de los meses que utilizamos actualmente.
CALENDARIO GREGORIANO
En 1582 el Papa Gregorio XIII promulgó el nuevo calendario, llamado Gregoriano. Habían pasado más de 1.600 años de vigencia del calendarioJuliano y los pequeños desajustes se habían hecho ostensibles al cabo de tanto tiempo. El calendario civil se había retrasado 10 días respecto al calendario astronómico; por lo que Gregorio XIII tuvo que decretar en 1583 el salto del día 10 al 20 de diciembre. Ese año, diciembre tuvo sólo 21 días.
El nuevo calendario fue inmediatamente adoptado en todos los países católicos, pero el resto del mundo tardó en aceptarlo, siendo Rusia y Grecia los últimos países que lo adoptaron en 1918 y 1923, respectivamente. Hoy está vigente en casi todo el mundo occidental y en partes de Asia.
El calendario gregoriano recibe también el nombre de cristiano, porque emplea el nacimiento de Cristo como punto de partida. Las fechas de la era cristiana son designadas a menudo con las abreviaturas d.C. (después de Cristo) y a.C. (antes de Cristo). Aunque el nacimiento de Cristo fue originalmente fijado el 25 de diciembre del año 1 a.C., los investigadores modernos lo sitúan ahora hacia el cuarto año de nuestra era.
La cuenta del año empezaba el 25 de Marzo, y se desplazó hacia el 25 de diciembre y el 1 de enero, en que se conmemora el nacimiento de Cristo (está clara la incongruencia de celebrar en días distintos el nacimiento de Cristo y el principio del año, cuando se pretende que la cuenta de los años empieza en este acontecimiento).
Como se ha indicado, el calendario gregoriano es básicamente un calendario cristiano. El calendario oficial de la Iglesia cristiana es la relación anual de las fiestas, los días de los santos y las festividades de la Iglesia, con las fechas del calendario civil en las que tienen lugar. Estas incluyen las fiestas fijas, como Navidad, y las fiestas móviles, que dependen de la fecha de Pascua. El calendario más importante de la Iglesia primitiva fue compilado por Furius Dionisius Philocalus hacia el año 354. Después de la Reforma, la Iglesia Luterana alemana conservó el calendario romano, lo mismo que la Iglesia de Inglaterra y algunas otras Iglesias anglicanas. Las principales estaciones del calendario eclesiástico observadas por la mayoría de los cristianos son, por orden, Adviento, Navidad, Epifanía, Cuaresma, Pascua, Ascensión, Pentecostés y Trinidad.

OTROS CALENDARIOS

El calendario judío, que procede del antiguo calendario hebreo, ha permanecido inalterable desde el año 900 aproximadamente. Es el calendario oficial del moderno estado de Israel y es utilizado por los judíos en todo el mundo como un calendario religioso. El punto de partida de la cronología hebrea es el año 3761 a.C., la fecha de la creación del mundo según se describe en el Antiguo Testamento. El calendario judío es lunisolar, basado en meses lunares de 29 y 30 días alternativamente. Se intercala un mes extra cada tres años, de acuerdo con un ciclo de 19 años.
Otro calendario religioso fundamental es el calendario islámico, utilizado en casi todos los países musulmanes. Se calcula a partir del año 622, el día posterior a la Hégira, o salida de Mahoma de La Meca a Medina. El año islámico consta de 12 meses lunares.
CALENDARIO ORIGINARIO
Principalmente el Calendario Originario contempla una referencia astronómica; se trata de un calendario luni-solar, ya que está enmarcado bajo las fases del sol y de la luna. Está dividido en trece meses de 28 días cada uno, con cuatro semanas de siete días, correspondientes a las cuatro fases lunares. En total se hacen 364 días, lo que conforma un año y el día que falta para completar los 365 días, está dedicado a la ceremonia del sol, éste o estos días (en el caso de años bisiestos) son llamados: WILLKA URU (en aymara) e INTI RAYMI (en quechua), y que coinciden con el inicio del Año Nuevo Originario, el 21 de Junio.
La celebración de cada Año Nuevo Originario, coincide también con el Solsticio de Invierno; una de las cuatro fases del recorrido del sol (dos equinoccios y dos solsticios). Esta etapa de inicio no sólo tiene que ver con un nuevo año, sino con el comienzo de un nuevo recorrido del sol, visto desde esta parte del planeta.
En Tiwanaku podemos observar, que la ubicación del Templo de Kalasasaya, tiene que ver con los cambios de la trayectoria del sol con respecto al planeta, marcando los cambios de estación y por consiguiente, la emanación de diferentes tipos de energía generados por el sol, que además coinciden con algunos lugares energéticos de gran trascendencia.
Así tenemos que :
  • Los rayos solares el 21 de Junio, entran por el lado noreste del Templo de Kalasasaya. Este lado además coincide con los picos del nevado Illampu.
  • Los rayos solares el 21 de Marzo y el 21 de Septiembre, entran por la parte central del Templo.
  • Finalmente, los rayos solares el 21 de Diciembre, entran por el lado sudeste y se alinean con el nevado Illimani.
GRÁFICO Nº 1
Dentro los ciclos naturales de la madre tierra y el cosmos, el inicio del recorrido del Padre Sol se da el 21 de junio en todo el hemisferio sur, marcando el inicio de un nuevo ciclo para todos los pueblos originarios de esta parte del planeta. Este ciclo consta de dos parcialidades, la parcialidad varón (chacha) y la parcialidad mujer (warmi). La parcialidad mujer o “warmi pacha”, inicia el 21 de septiembre y termina el 21 de marzo, y la parcialidad varón o “chacha pacha” inicia el 21 de marzo y se extiende hasta el 21 de septiembre como se muestra en el gráfico:

CEREMONIAS EN ARMONÍA CON LA MADRE TIERRA Y EL COSMOS
GRÁFICO Nº 2
La parcialidad mujer expresa la fertilidad de la madre tierra; es época de siembra y cosecha. Esta  época está ligada a la época de lluvias –jallu pacha-. La parcialidad varón es época seca y fría, autipacha y juipipacha respectivamente; la tierra descansa y cesan las lluvias, el cielo está despejado y podemos ver las estrellas, es tiempo de conexión con el cosmos.
A partir de los primeros días de junio del calendario gregoriano (llegando a su final el calendario originario), se acostumbra realizar algunos rituales; en el mundo andino se llama el ajayu[1] y se lee la suerte, en una búsqueda de “recogerse”, alinearse, “volver a unirse con energías que a veces dejamos en nuestro caminar” y los abuelos nos sugieren resolver -en este tiempo previo al 21 de junio-, todo aquello que estuviera pendiente, como deudas, compromisos no cumplidos, desencuentros, peleas, etc., para que lleguemos al 20 con todo en orden; nuestras vidas, nuestras casas, nuestras relaciones y,  con una nueva fuerza poder empezar este nuevo sol. El día 21 es un día neutro, el tiempo del no tiempo, un tiempo de amuki[2], que antecede a toda proyección que hagamos a partir del 22 de junio.
Este NUEVO CICLO contempla dos formas de contar los meses:
  • Lunar movible:      Está ligado a las fases lunares. Se cuenta de una luna nueva a otra luna nueva.
  • Solar estático:       Dividido en 28 días fijos, conformando 13 meses,  y un día ceremonial, el 21 de Junio, dedicado a unir las energías del cielo y de la tierra.  Cada cuatro años se tienen dos de estos días ceremoniales, por ser años bisiestos.
¿ Cómo nace la división del mes en 28 días ?

En el idioma Aymara, “Phaxsi” se entiende  de dos formas que van relacionadas: significa “mes” y también “luna”, lo que implica una clara relación entre ambos; las cuatro fases lunares (nueva, creciente, menguante y llena) con una duración cada una de siete días aproximadamente y las cuatro semanas que tiene un mes, dando en ambos casos ciclos de 28 días.
La experiencia nos muestra que es importante adecuarse a los ciclos del Universo, porque es  así que surge la armonía con la naturaleza, que es uno de los principios del mundo originario, como de muchas otras civilizaciones ancestrales del planeta.
Antigüedad del Calendario Originario
Actualmente uno de los calendarios ancestrales que ha sido oficialmente aceptado desde el año 1992, es el Calendario Oficial Andino[3]. En un inicio fue aceptado en los países de la región andina (Ecuador, Perú, Bolivia, Norte Chileno y Norte Argentino), posteriormente se fueron unificando en este conteo los pueblos originarios de Colombia, los pueblos amazónicos de Brasil, el pueblo Mapuche al Sur de Chile, y actualmente se están sumando algunos pueblos de Venezuela. Según este calendario, el 21 de Junio del año 2008 entramos al año 5516, el mismo que corresponde a la medida y conteo en el mundo andino-amazónico, y ha sido aceptado para fines de poder unificarnos y empezar a dialogar, usando un mismo lenguaje a nivel de pueblos originarios. Esta cifra desde ya nos da la pauta de que existe una historia de más del doble de lo que considera Occidente, que sólo contempla alrededor de 2600 años (2008 años más seis siglos antes de Cristo).  Y de hecho según estudios e investigaciones de científicos entendidos en la materia, se puede llegar fácilmente a comprobar incluso hasta 6000 años de historia.
Sin embargo, recordemos que el mundo originario en América abarca etapas mucho más antiguas; si hablamos de los “Urus” por ejemplo, es posible remontarnos a los inicios de la historia de Los Andes. Tan sólo si intentamos retroceder a lo que fue el origen de Tiwanaku, vamos a encontrar que definitivamente el mundo aymara es más antiguo de lo que se pretende reconocer hoy en día.
Un calendario aún más ancestral fue recuperado de la Provincia Pacajes, y que por cierto, donde han dado mayor atención y ayuda para recuperarlo es en el Norte Chileno. Cabe destacar también que, antiguamente Pacajes abarcaba parte de las costas de Perú y Chile, además de una parte muy extensa de Bolivia. “Pacajes”, viene de los términos aymaras Paca – Jaques, que significan “hombres águila”, y por lo tanto, “hombres que traen la luz”.
Por una serie de factores, entre ellos que los españoles consideraban a esta región como una zona inhóspita, Pacajes conservó, mucho más que otras regiones, mucho de la cultura andina originaria. Uno de los aspectos de la sabiduría ancestral que no se perdió, fue el conteo de los años. Un calendario que, de manera oral se fue transmitiendo de generación en generación. Los abuelos lo plasmaron en mitos y en canciones.
Dos comunidades cerca de la población de Santiago de Machaca son quienes custodiaron este registro de los tiempos: el Ayllu Condor Amaya,  uno de los centros de origen de la Familia Huanacuni, y el Ayllu Machaq Uyu, de la familia Mamani. Guardaron los registros en chinus (nudos) y piedras de colores. El 21 de Junio de 1992, se celebró el inicio del primer sol del tercer Sol Cósmico o Gran Sol de la novena generación. En aymara, la abuela nos dice: “Mawillka kalltastanwa quimsa jacha willakata llatunka wilasata sarajkipana” [4]. Este calendario, para  el 21 de Junio de 2008 marca el inicio del año 40016.
En los Templos de Tiwanaku, podemos encontrar varios referentes que ratifican esta forma de conteo. Nuestros ancestros grabaron en la Puerta del Sol, varias figuras, entre ellas el friso en la parte inferior que muchos investigadores concluyeron que se trata de un calendario. Este “friso calendario” también se puede observar en la Puerta de la Luna, en el Templo de Puma Punku y en algunas estelas encontradas en Tiwanaku.
La estructuración de los años se maneja como se muestra en el gráfico Nº4  (Figura Central y Friso Calendario de la Puerta del Sol). Lo escalonado es un arquetipo que aparece en la arquitectura de Tiwanaku y en general en las pirámides que se han encontrado en América. Como podemos observar en el gráfico Nº 5, un “Jacha Willka” (Sol Cósmico o Gran Sol) consta de 20000 años y está compuesto de cinco soles, teniendo cada sol una duración de 4000 años. De tal forma nos encontraríamos en el primer sol del tercer Sol Cósmico o Gran Sol (Jacha Willka).
GRÁFICO N º 5
Cada  etapa es de 500 años (como la que está contenida en la lupa del gráfico Nº 5). En el gráfico Nº 6  vemos que cada sol tiene  8 etapas de 500 años, el mismo que dura 4000 años en su desarrollo total, de los cuales 2000 años son de ascenso y 2000 de descenso. A estos procesos de ascensos y descensos, los historiadores llaman la ciclicidad de los tiempos.

                                   GRÁFICO N º 6

Dentro de este primer sol del tercer  Sol Cósmico, nos encontramos en la primera etapa de 500 años que se inició el 21 de Junio de  1992, año en que empieza un ciclo para Los Andes, un proceso de ascenso que durará 2000 años. A partir de entonces, comenzamos un nuevo tiempo en nuestra historia, un nuevo sol, por lo tanto, una nueva expresión en el lenguaje de la vida, donde la comunidad cobra vigencia, y así la voz de los pueblos ancestrales resurge.
Estos nuevos 2000 años que estamos empezando a recorrer, tienen un común denominador, el espíritu es el de COMUNIDAD; el nuevo lenguaje que todos van a comenzar a hablar, dando un paso más hacia la reestructuración de las comunidades, después de haberse desarrollado un tiempo fuertemente marcado por el “individualismo”.
Si nos remontamos en la historia, conforme lo describe el Gráfico Nº 7, vemos que después de alcanzar su expresión más alta la historia de los pueblos el año – 8, coincidiendo con el último proceso de desarrollo de Tiwanaku, se da fin a una etapa para ingresar en el descenso de la historia; el Consejo de Tiwanaku se retira a las montañas.

GRÁFICO Nº 7

A partir del año – 8 , se activa el espíritu de “individualismo”; con lo que los seres humanos van cambiando su forma de sentir y por tanto su forma de vida. Los seres humanos se van separando y fortaleciendo en sí mismos. Conforme el proceso va avanzando (en este caso en descenso), esta expresión se va fortaleciendo también y alcanzando expresiones cada vez más fuertes de individualismo.
El año 492 las comunidades aymaras empiezan a disgregarse ante la ausencia del Consejo de Amawtas de Tiwanaku.
Quinientos años después, el año 992, fueron enviados a todo el reino, desde los Templos de las montañas, los 4 hermanos Ayar con sus respectivas parejas, a fin de poder reestablecer el orden. Ayar Cachi, Ayar Uchu, Ayar Sauca y Ayar Manco, este último tomó el nombre de Manco Capaj y su pareja Mama Ocllo, todos ellos de entre 14 y 16 años de edad. Cada uno de ellos se dirigió a los cuatro puntos cardinales, e indican las profecías aymaras, que los descendientes de estas 4 parejas retornarán a las montañas en este nuevo tiempo, reunificando las fuerzas del Sol, de la Luna, de la Pachamama y del viento, representando cada uno el fuego, el agua, la tierra y el aire, siendo el corazón el elemento unificador a través del éter.
Desde el año 992 se desarrolla el Tahuantinsuyo hasta alcanzar su máximo esplendor y posteriormente el fin del Incario con la llegada de los españoles el año 1532.
El 21 de Junio de 1492 se realizan ceremonias en los templos de Koricancha en Sudamérica, en Teotihuacan en Centro América y en todos los templos en América, donde las ancianas y ancianos anuncian la llegada de los españoles y se ordena el cierre de todos los Templos sagrados,  así también mantener en silencio la referencia de la existencia de los mismos en las montañas. A partir de 1492 se ingresa al proceso más duro de descenso de la historia andina que se extiende hasta 1992.
En 1992, se restablecen las ceremonias en los templos sagrados, y también los Consejos de Ancianos en Tiwanaku (Sudamérica), en el pueblo Maya (Centroamérica) y en la Nación Aztlan (Norteamérica).
Los ancianos y ancianas comienzan a emprender peregrinaciones sagradas por la unificación de los pueblos. En diferentes lugares sagrados ancestrales, en 1992 se realizaron ceremonias para recibir este Nuevo Sol, especialmente en un lugar en el océano Pacífico.
Este nuevo tiempo que se inicia el año 1992, hace que la humanidad retome nuevamente el lenguaje de COMUNIDAD. Desde ese año, surge una tendencia más fuerte de los países de querer encontrar denominadores comunes para poder unificarse. El ejemplo lo dio la Comunidad Económica Europea.
No se trata únicamente de tener una moneda en común, sino de un arquetipo, el simbolismo de un nuevo lenguaje. De igual forma el MERCOSUR, el MERCONORTE, aunque no estén libres del todo de arquetipos de individualismo, responden a una intención de querer unificar algo.
Una de los aspectos que se pudo ver, en las jornadas de Octubre del año 2003 en nuestro país, es que los líderes políticos y sindicales, fueron rebasados por la organización y fuerza de la comunidad. Es algo que ni ellos mismos están comprendiendo; este proceso de expresión del lenguaje de “comunidad”, de colectividad, que supera al hecho de esperar a que “alguien” realice una convocatoria al pueblo, pues éste se convoca a sí mismo de forma espontánea. Mientras los dirigentes están planificando, el pueblo ya está en las calles. Los líderes resultan “corriendo detrás del pueblo para la foto”.
Ahora ya no hay lugar para las expresiones sólo de interés unipersonal, la importancia que tenía la categoría de “líder” se está diluyendo cada vez más. El lenguaje ahora es el consejo, la comunidad (comun-unidad), el consenso, la horizontalidad y el bienestar común.
Bolivia y el mundo se encuentran en una transición importante; una oportunidad de retomar los procesos de consenso en busca del bienestar común. Para nuestro país, es imperativo reestructurar la forma de administración, de comunicación, de distribución, de educación, de hacer política; es importante la formación de Consejos que representen a todas las comunidades con sus diferentes expresiones, proyectando un país de unidad en la diversidad.
Necesitamos estar lúcidos y entender la ciclicidad de la historia, saber en qué momento un proceso asciende y otro desciende. Pero además de esta expresión material, para el mundo Andino existe una expresión espiritual, que se considera aún más importante.
A diferencia de los historiadores y en general la cultura occidental, que sólo consideran los aspectos materiales, para el mundo Andino existe un mundo visible y otro invisible; materia y espíritu, que se manifiestan en todos los niveles de la vida; del ser humano, de los pueblos y del universo en su conjunto. Y también sabe que estos dos mundos o expresiones son inseparables. Mientras se da un ascenso material, simultáneamente se produce un descenso espiritual y mientras hay un descenso material,  se produce ascenso espiritual.
Este es un proceso que está perfectamente representado por la CHACANA (la cruz del sur, la cruz andina), como en el gráfico que se muestra a continuación:
                                            GRÁFICO Nº 8

LO QUE TRAE CONSIGO ESTE NUEVO SOL

Los procesos iniciales de cada nuevo sol (de cada proceso de cuatro mil años), se dividen en dos etapas de nueve años, en total 18 años. Cabe destacar la importancia del número 9 para la cultura andina (incluídas todas las cifras que al sumarse sus dígitos el resultado sea 9) y en general para muchas culturas ancestrales como un arquetipo de medida del universo.
Entonces la primera etapa de cada nuevo sol, constituye el proceso de destrucción del proceso anterior, y los segundos nueve años, constituyen el proceso de construcción de los nuevos tiempos.

GRÁFICO Nº 9

El punto de inicio de este nuevo sol es el año 1992, ahora, si sumamos nueve años al año 1992, tenemos el año 2001 y sumando nueve más a éste, el año 2010. De 1992 a 2001, se da la época más crítica del proceso de cambio de la historia, y si revisamos qué ocurrió en la historia en esos años, vamos a encontrar cambios que la humanidad no se imaginó jamás; la caída del Muro de Berlín y la culminación de la Guerra Fría por ejemplo, desde ese año también dejaron de tener trascendencia las tendencias de izquierda o de derecha extremas, cambiaron aspectos filosóficos, políticos, cambios de valores, etc., y también ocurrireron cambios en la expresión de la tierra, la Pachamama; la ciclicidad del clima por ejemplo ya no es la misma, ya no tenemos estaciones tan marcadas; las olas de calor, de frío, lluvias intensas, etc., muchas cosas están cambiando. Fue la etapa de remoción de las viejas estructuras.
Desde el año 2001, han comenzado a estructurarse los principios de la nueva expresión de la tierra, de los seres humanos, de las estructuras político-sociales, incluso nuevas formas de vida; la vida está siendo cuestionada, fragmentada, manipulada, a partir de conocer más a fondo el código genético. Estamos en una etapa de consolidación de las nuevas estructuras a todo nivel.
Ahora, el calendario andino muestra dos años de diferencia entre las expresiones visible e invisible, ó de la expresión sutil a la expresión material. Dos años después de 1992, el año 1994, en el mes de noviembre ocurre el eclipse de sol en la  montaña Thunupa (Salar de Uyuni). Sabemos que todo eclipse siempre lleva un mensaje para el lugar donde ocurre; si el sol o la luna cambian, cambia la humanidad también. Igualmente, sumando nueve años a 1994, tenemos el año 2003, y el 2012 después.
Recordemos que el año 2003 (dos años después de 2001), en los meses de mayo y noviembre ocurren dos eclipses lunares en la Amazonía, en la frontera entre Brasil y Bolivia como antípoda del solar.
Nueve años después del 2001, es decir,  el año 2010, para el mundo andino será el año del “AMUKI”, el año del silencio, cuando la energía (Pacha Ajayu) proveniente del Tibet haya completado su recorrido en el Lago Titikaka. Como expresión material del año 2010, el año 2012 se esperan cambios de vital importancia para nuestra región.

La llegada del “PACHAKUTI”

Es importante saber que por mucho tiempo, la energía activa estuvo centrada y por lo tanto expresada,  en la Laguna Hakas a los pies de la montaña Kailas (Tibet), y al otro lado como contraparte, haciendo equilibrio, estaba la energía pasiva, centrada en Los Andes. Estas fuerzas o energías provenientes del sol, llegan a la tierra y son captadas por los polos; al llegar a la tierra esta energía se divide en lo que podríamos llamar energía positiva y energía negativa o energía activa y energía pasiva (chacha – warmi).
Desde 1950 cambia la polaridad y empieza un recorrido hacia la inversión de estas dos fuerzas; se da un desplazamiento por la parte norte y otro por la parte sur, para comenzar a convergir en el Lago Titikaka, específicamente Wiñay Marka (Lago Menor) a partir del año 2010 – según el mundo andino-. Dos años después, el año 2012, se espera otro fenómeno astronómico lunar y/o solar, que va a unir la energía de Los Andes con la de la Amazonía, la del polo Sur y la del Polo Norte. Este año (2012), representa la fecha que nos proyecta a la nueva etapa de la civilización Andina, y que coincide con la culminación del calendario que proyectó en su época la civilización Maya.
El Calendario Maya termina el año 2012 y a partir de entonces ellos mismos remiten el proceso de este nuevo tiempo a Los Andes, donde se ha empezado un nuevo conteo desde 1992. Incluso muchas otras culturas ancestrales como de Norteamérica y de la China, tienen muchas expectativas de lo que va a ocurrir en Los Andes. Hay algunas que afirman en sus profecías, que las respuestas a este momento tan difícil al que la humanidad ha llegado, emergerán de “los guerreros del arco iris”, refiriéndose a los pueblos ancestrales del Sur.
CONCLUSIONES
El calendario gregoriano todavía tiene meses de distinta duración, haciendo que fechas y días de la semana cambien con el tiempo,  es por eso que se han hecho numerosas propuestas para un calendario reformado más práctico y exacto. Estas propuestas incluyen un calendario fijo de 13 meses iguales y un calendario universal de cuatro periodos trimestrales idénticos. Hasta ahora no se ha adoptado ninguno.
Hoy en día se ha comprobado que la mejor forma de medir el tiempo, es a través de las oscilaciones de los átomos de cesio 133, por su vibración constante, y bajo estos estudios, los científicos han llegado a la conclusión de que la mejor forma de estructurar el tiempo es en años de trece meses de 28 días. Estamos retornando después de muchas investigaciones a algo que ya nuestros abuelos conocían y manejaban perfectamente.
El calendario gregoriano es un instrumento totalmente “desincronizado”de la naturaleza, por su estructurade 12 meses, con 31, 30, 29 y 28 días cada uno y donde ponen un movimiento lunar de 28 días en una plantilla de 30, mezclando parte de dos lunas en un mes. Su uso es estrictamente comercial, pues, para los humanos la única y gran fuerza que mueve el uso del calendario gregoriano, es ver cuándo cobramos, o cuándo pagar las cuentas, si ya llegan nuestros cumpleaños u otras fechas importantes, o cuándo nos vamos de vacaciones. De tal forma, es de esperarse que las vidas regidas bajo el calendario Gregoriano, estén al margen de la naturaleza, del universo.
En cambio, el calendario Andino-Amazónico está sincronizado con la naturaleza, con el Universo (multiverso).
Todas las culturas ancestrales, incluso las europeas, como los celtas, los druidas, tenían esta misma lógica de pensamiento, y por lo tanto una forma de vida unida al universo. Un lenguaje común más allá de los continentes, que contempla la observación y entendimiento del universo, por la sencilla razón de que, todo lo que ocurre en éste, ocurre también en las sociedades y en los seres humanos.
Es tan importante recuperar la verdadera dimensión del tiempo, pues nos permite entender el nuevo tiempo que estamos viviendo, entender los cambios que estamos viviendo. Entender que la historia y la vida misma son cíclicas y dinámicas, pues están en permanente cambio, cambios que a veces al ser humano estático le infunden temor, pero que simplemente obedecen a un proceso natural del universo y que si somos capaces de unirnos a él, tenemos la certeza de que no hay nada que temer.
Esta es la cosmovisión que nos legaron nuestras abuelas y abuelos.  Tomado de Sariri "Caminante de los Andes.
Jallalla!!!!

[1]Animo, la fuerza, la energía, la conciencia.
[2]Silencio, no sólo de palabra, también de pensamiento.
[3]Basado en los descubrimientos arqueológicos de la Civilización Andina, especialmente en los datos del  desarrollo de la cultura Tiwanaku y el registro histórico de las diferentes crónicas de la época de la colonia.
[4]Primer sol del Tercer Sol Cósmico de la Novena Generació

MITO AZTECA DE LA GUERRA DE LOS SOLES


 

El pueblo Azteca, antes llamado mexica, fue el último de los grupos nahuatlacos que llegaron a la cuenca de México, a finales del siglo XIII, cuando la mayor parte de los territorios centrales del país habían sido ocupados. Por tal motivo, se vieron obligados a luchar incansablemente para establecerse en el gran lago de México, en donde construyeron su espléndida capital, Tenochtitlán. El siguiente mito sucede en el contexto de los Cinco Soles aztecas y fue tomado de la obra Guerreros, Dioses y Espíritus de la Mitología de América Central y Sudamérica, de Douglas Gifford.
.
Se cuenta que, hace muchísimos años, hubo dos soles, uno viejo y otro joven. Un día, el viejo Sol le dijo al joven:
—Vamos a buscar un poco de miel para comer.
—Sí, me gustaría tomar un poco de miel —dijo el joven—, pero me duele una pierna y no puedo subir a un árbol.
—No te preocupes —le dijo el viejo Sol—. Yo subiré al árbol.
—¿Y me darás un poco de miel?
—Por supuesto —dijo el viejo Sol—. ¿Por qué no?
Los dos soles se adentraron en el bosque y pronto encontraron un árbol que tenía miel. 
—Subiré y, desde lo alto, te tiraré parte del panal —dijo el viejo Sol. Y trepó al árbol, hasta llegar a una rama en la que las abejas habían hecho su panal. Enseguida empezó a atiborrarse del dulce líquido.
—¡Eh! ¿Y yo qué? —gritó el joven Sol desde abajo.
—Espera un poco. Enseguida te doy un poco —dijo el viejo Sol, desde la copa del árbol—. Abre la boca.
El joven Sol miró hacia arriba con la boca abierta, y entonces el viejo Sol le tiró un trozo de panal. Para desgracia del joven Sol, ya no quedaba ni una pizca de miel y aquello no era sino una masa de cera.
El joven Sol protestó, pero el viejo le dijo que él había comido exactamente lo mismo.
—Toma, prueba ese trozo —le gritó, arrojándole otro pedazo de cera. - El joven Sol se enfadó mucho.
—Ya te daré yo a ti cera, ya —murmuró; y comenzó a modelar figuras de animales con la cera, y a ponerlas alrededor del tronco del árbol.
Uno a uno, los pequeños animales de cera cobraron vida; hasta que, al fin, se convirtieron en una manada de agutís, que empezaron a roer la tierra y luego las raíces del árbol. El viejo Sol, que seguía trasegando miel, no se enteró de nada hasta que el árbol comenzó a resquebrajarse y a tambalearse.
—¿Qué pasa? —preguntó el viejo Sol—. Parece que el árbol se tambalea... ¡Socorro!
Y el árbol, en efecto, con gran estrépito, cayó al suelo. En ese instante el viejo Sol desapareció del mundo, pero en su lugar apareció una manada de cerdos, de los cuales descienden todos los cerdos y jabalíes que hoy día existen. Se cuenta que su carne es rica y dulce, pues nacieron del Sol que se había comido toda la miel de aquel panal.   Tomado de Mitosla.