miércoles, 27 de abril de 2016

SABERES ANCESTRALES Y EDUCACION COMUNITARIA ANCASH PERU

Foto: Sabios expertos en la elaboración del telar denominado “bayeta”, cuya materia prima es la lana de ovino. Es una actividad que realizan mayoritariamente los varones.
Sabios expertos en la elaboración del telar denominado “bayeta”, cuya materia prima es la lana de ovino. Es una actividad que realizan mayoritariamente los varones.
 No solo el carnaval de T´ikapallana es motivo de orgullo de los cotabambinos. Sus saberes ancestrales también lo son y esto lo saben muy bien hasta los más pequeños. Por eso pudimos comprobar el feliz encuentro de tres generaciones de yachaq durante los tres días que duró la primera “Mesa técnica de saberes ancestrales quechua y sus formas de enseñanza y aprendizaje en espacios comunitarios”.
El sabio Gabino del distrito de Haquira, explica al director de la UGEL Cotabambas sobre las diversas formas elaboración de la waraka (honda), hecha de fibra de alpaca, ovino y llama, actividad que realizan mayoritariamente los varones.
El encuentro, realizado los días 13, 14 y 15 de abril en Tambobamba, capital de la provincia de Cotabambas, departamento de Apurímac, congregó a cuarenta sabios y sabias provenientes de 18 comunidades de los distritos de Mara, Haquira, Challhuahuacho y la misma Tambobamba, a sus alcaldes, funcionarios de la UGEL Cotabambas, líderes comunales, docentes, entre otros.
Óscar Badillo Espinoza, coordinador de la Unidad de Educación Comunitaria del Ministerio de Educación (Minedu), organizadora del evento, señaló que el objetivo es promover la difusión y transmisión de los saberes ancestrales del pueblo quechua y sus formas de enseñanza y aprendizaje en los diversos espacios de la sociedad y en diversos procesos educativos institucionalizados.
"Es la primera vez que se desarrolla un evento de esta naturaleza que ha permitido tomar contacto con las expresiones culturales milenarias transmitidas intergeneracionalmente y expresadas a través de mantas, llicllas, chumpis, bayetas, huaracas, riendas, chullos, entre otros productos, que son expresión viva de su cotidianeidad, de sus sueños, de sus miedos, de sus apus tutelares, en suma, de toda su cosmovisión", agregó.
Mientras el sabio Ramón iniciaba la ceremonia con un tributo a la Pachamama, los asistentes dejaban lo que estaban haciendo para participar en el agradecimiento y permiso. Este pequeño ritual, que recorre casi toda la cordillera andina, es el punto de partida desde el cual se desarrollan todos los saberes y aprendizajes. 
En el encuentro, los sabios tuvieron el noble gesto de informar a los asistentes cómo se aprende y cómo se enseña, dónde se enseña y dónde se aprende, cuándo se aprende y cuándo se enseña. Toda la pedagogía empleada en el proceso de la elaboración de materiales fue compartida en el evento que forma parte del proceso de registro de saberes de educación comunitaria que impulsa el Minedu. Como no podía ser de otra manera, el taller se realizó en la lengua, es decir, en quechua. 
La metodología de trabajo permitió que los yachaq (sabios y sabias) compartan sus experiencias agrupados por tipo de saber y por generaciones: adultos mayores (65 a 80 años), adultos (hombres y mujeres de 30 a 45 años) y jóvenes sabios de 22 a 26.
"Esta mesa técnica ha evidenciado una enorme riqueza de saberes de la que se desprende una inmensidad de expresiones culturales aún por visibilizar, y es un tema aún pendiente desde la Unidad de Educación Comunitaria y desde las distintas áreas de la Educación Intercultural Bilingüe, en el marco de una educación inclusiva e intercultural y de fortalecimiento de la identidad cultural", sostuvo el funcionario.
Uno de los sabios expresó: "Ahora más que nunca renace la sabiduría heredada por nuestros ancestros". Otro dijo: "Los saberes locales y ancestrales deben ser incluidos en el currículo escolar". Y una de las autoridades presentes confesó una autocrítica: "Las municipalidades debemos promover los saberes ancestrales con proyectos que contribuyan al desarrollo local".
El último día, la plaza principal de Tambobamba brilló de multicolores gracias a la feria de saberes que presentaron los sabios y sabias y a la que concurrieron los pobladores, estudiantes y profesores.
Fajas,Llicllas,Mantas :labores preferentemente femeninas

APRUEBAN LEY DE CONSULTA PREVIA PARA LOS PUEBLOS INDIGENAS DE PANAMA

Imagen: Asamblea Nacional

El congreso de Panamá el proyecto de ley que establece la consulta previa para los pueblos indígenas de Panamá ante la “trasgresión permanente” de sus derechos y la “peligrosa tendencia” de los gobiernos de “sobrepasar los límites de las violaciones” de sus derechos humanos.
El proyecto de Ley  81 que establece la consulta previa a medidas legislativas y administrativas que afecten los derechos colectivos de los pueblos indígenas fue aprobado el 25 de abril en una tercera votación en la Asamblea Nacional ( Parlamento).
La norma dispone que la consulta "sea realizada directamente por entidades estatales antes de la adopción y aplicación de medidas legislativas o administrar que afecten directamente los derechos colectivos, la existencia física, identidad cultural, calidad de vida o desarrollo de los pueblos indígenas".
De este modo, deben ser consultados “los planes, programas y proyectos de desarrollo nacional, comarcal y regional que afecten directamente estos derechos", indicó la Asamblea Nacional en un comunicado.
“El acuerdo entre el Estado, empresas, autoridades tradicionales de las comarcas y comunidades indígenas, como resultado del derecho a la consulta y consentimiento previo, libre e informado a los pueblos indígenas, es de carácter obligatorio para todas las partes”, explicó la Asamblea.
“Para tal efecto, las autoridades tradicionales deben estar registradas debidamente en el Ministerio de Gobierno.”, precisó el comunicado.
Al respecto, la diputada Crescencia Prado afirmó que le ley se origina “ante la falta de respeto a los pueblos indígenas y la trasgresión permanente de las normas que amparan sus derechos colectivos e históricos”.
Asimismo, “ante una permanente y peligrosa tendencia de los gobiernos que lo llevan a sobrepasar los límites de las violaciones de los derechos humanos de los pueblos indígenas.”
Por su parte, los diputados Aibán Velarde, Jaime Pedrol Mónica Quintero y Mario Miller, consideraron que el proyecto promoverá el desarrollo y crecimiento del país mediante el diálogo y respeto a los “principios originarios” de los indígenas.
Antes de entrar en vigor, la Ley debe ser aprobada por el Poder Ejecutivo y publicada en el medio oficial   Tomado de SERVINDI  Servicios de comuniccion intercultural

COMUNIDADES SIPIBAS DE LA AMAZONIA PERUANA LOGRAN HACER PREVALECER SUS DERECHOS

La comunidad shipiba Santa Clara de Uchunya de Ucayali y la Federación de Comunidades Nativas de Ucayali (FECONAU), con el apoyo de Forrest People Programme (FPP) y el Instituto de Defensa Legal (IDL), acaban de lograr una histórica decisión de la RSPO (Mesa redonda sobre aceite de palma sostenible), un mecanismo conformado por empresas de palma aceitera alrededor del mundo cuya labor es garantizar que sus miembros cumplan con los requisitos para tener una certificación internacional de buenas prácticas.
El panel de quejas de esta asociación aplicó una orden preliminar de ‘detener trabajos’ a Plantaciones de Pucallpa SAC, que le pertenece al Grupo Melka (unos de los miembros de la RSPO, y cuyas operaciones están afectando el territorio ancestral de la comunidad denunciante.
Según el comunicado emitido por el organismo internacional, la orden se emitió después de que dicha comunidad presentara una queja formal en diciembre de 2015 por la destrucción de más de 5000 hectáreas de su bosque ancestralEsta cita los impactos devastadores para los ríos y la ecología forestal -de la que dependen los comuneros para la subsistencia-, la destrucción de casas de la comunidad y las restricciones impuestas por la empresa a los comuneros que quieren entrar al bosque.
Esta queja es la primera de este tipo en presentarse en el Perú, donde actualmente solo hay cuatro miembros de la RSPO, entre los cuales se encuentra Plantaciones de Pucallpa. 
El comunicado señala cinco áreas claves en las que habrían sido infringidos los principios de la asociación. Estas incluyen: el no respetar los derechos territoriales consuetudinarios que son una obligación legal en este país, la deforestación de bosque primario que está estrictamente prohibido por la legislación peruana y los procedimientos de la RSPO, y la deforestación sin los permisos que exige la ley peruana.
Más aún, la asociación compuesta por representantes de todos los actores involucrados en la industria de palma aceitera, resaltó que sus Procedimientos para Nuevas Plantaciones (PNP) han sido claramente violados, ya que la RSPO no fue notificada antes del inicio de las actividades. Los PNP también requieren que antes del inicio de las actividades las empresas realicen estudios del impacto ambiental, una evaluación de las áreas consideradas con Alto Valor de Conservación e inicien procesos para lograr el consentimiento libre, previo e informado (CLPI) de las comunidades afectadas. La queja inicial estableció claramente que la empresa no ha realizado ningún proceso de CLPI con la comunidad de Santa Clara de Uchunya
El panel de quejas, además, recordó a la empresa que la intimidación de comunidades está estrictamente prohibida. Esta acotación es importante pues los dirigentes de las comunidades cercanas a la plantación han recibido múltiples denuncias legales infundadas de parte de Plantaciones de Pucallpa. Mientras tanto, otros activistas locales han recibido amenazas anónimas de muerte en los últimos meses a raíz de su oposición abierta a las operaciones de la empresa.
El panel de quejas de la RSPO le ha dado, entonces, a Plantaciones de Pucallpa 14 días para demostrar que han cumplido con las obligaciones establecidas, entre ellas:
1. Demostrar que se ha cumplido con todos los requerimientos legales en la adquisición, tala y siembra del área de concesión                                                                2. Demostrar que al establecer la plantación no se ha talado el bosque primario u otra área de alto valor de conservación.                                                                                   Mientras tanto, el panel prohíbe a Plantaciones de Pucallpa que lleve a cabo cualquier actividad de tala y siembra en espera de la resolución de esta queja.
Las autoridades de la comunidad de Santa Clara, apenas unos días antes de esta resolución, reiteraron su queja y explicaron que: “Desde que presentamos la queja , la empresa Plantaciones de Pucallpa SAC sigue ocupando la zona en cuestión que ahora está rodeada por una cerca de alambre de púas y controlado por un puesto de control impidiendo la entrada de nuestros comuneros a nuestro territorio…. Además, nuestras autoridades y miembros están siendo denunciados ante las autoridades judiciales por operadores de esta compañía por oponerse a la deforestación y por defender nuestro territorio y de ninguna manera vamos a renunciar nuestros derechos a la vida y el territorio.”
¿QUIÉNES SON ESTOS EMPRESARIOS?
Plantaciones de Pucallpa es una de las empresas registradas en el Perú con conexiones a una red corporativa compleja, que se conoce colectivamente en el Perú como el Grupo Melka, esta red es aparentemente controlada por Dennis Melka, un empresario de EEUU. El Sr. Melka fundó la agroempresa Asian Plantations en Malasia. Empresas del Grupo Melka en el Perú, entre ellas Cacao del Perú Norte SAC y Plantaciones de Ucayali SAC y sus empresas matrices United Cacao Ltd y United Oils Ltd, han provocado denuncias similares de deforestación ilegal y conflictos territoriales.                                                                                                                                  ¿QUÉ HA HECHO EL ESTADO?                                                                                             AL PARECER, NO MUCHO. MÁS ALLÁ DE APARECER SIMPLEMENTE PARA NO QUEDAR MAL. EL 2 DE SETIEMBRE DEL 2015 EL MINISTERIO DE AGRICULTURA ORDENÓ LA SUSPENSIÓN DE LAS OPERACIONES DE PLANTACIONES DE PUCALLPA SAC PERO hasta la fecha esta orden aparentemente no ha sido implementada.                                                                                                                                                   ¿QUÉ CONSECUENCIAS PODRÍAN PERJUDICAR A LA EMPRESA SI NO CUMPLE ESTA ORDEN?
Los certificados internacionales de buenas prácticas son en muchos países requisitos para que algunos productos ingresen al mercado. De quitársele el certificado, el Grupo Melka sentiría el golpe donde le duele (y tal vez, en el único lugar donde realmente siente algo), el bolsillo. A pesar de eso, la solución de problemas como este está lejos de ser el de las certificaciones internacionales.
El Dr. Tom Griffiths, Coordinador del Programa de Financiación Responsable del FPP, señala: "Es cierto que estos sistemas de certificación voluntaria juegan un papel importante pero no pueden remplazar a un sistema efectivo de regulación local, nacional y mundial para toda la cadena de suministro de productos como el aceite de palma. En el caso del Perú,los compromisos ambiciosos del gobierno peruano para la protección de los bosques y el respeto de los derechos territoriales de los pueblos indígenas fracasarán si no se introducen reformas en los marcos normativos que regulan la deforestación, el cumplimiento de la ley y un sistema injusto para la adjudicación de tierras”.
El Estado se tiene que poner las pilas y plantear reformas que defiendan el territorio y los bosques. Mucho más si se acaba de comprometer frente al mundo en ser un actor importante en la defensa del medio ambiente

viernes, 22 de abril de 2016

MANIFIESTO DEL CONSEJO CONTINENTAL GUARANI ARGENTINA


Foto: Kaosenlared (Referencial)

En cada país de la región los pueblos indígenas siguen luchando por una normativa y una institucionalidad estatal que se comprometa y garantice el respeto a sus derechos, consagrados ya en abundante legislación internacional. Pero el camino es arduo. El presente artículo habla de ese camino en Argentina
Las condiciones materiales de existencia de las comunidades indígenas que habitan en el territorio argentino han marcado su propio punto de vista y sus praxis políticas, descentrando y cuestionando el sesgo racista y etnocéntrico del Estado; y dirigiendo sus luchas políticas hacia varias direcciones. Por una parte, buscan el reconocimiento de su cultura, la redistribución económica y que se reconozca la historia de colonización. Por otro lado, ponen en cuestión al Estado racista y segregacionista, buscando la autodeterminación como pueblos.
Las formas de negar la existencia de otros/as puede darse de muchas y diversas formas. A lo largo de la historia argentina se viene sucediendo un genocidio que comenzó con la conquista de América y que se ha perpetuado y perpetrado hasta nuestros días. Sin importar el color político que estuviera al frente del Gobierno ni la verborragia que expusieran sus funcionarios/as los pueblos indígenas han sufrido todo tipo de avasallamiento y han compartido a lo largo del territorio argentino una fosa común cargada de olvido.
Sin embargo, “el presente mantiene con el pasado una relación paradojal por la cual en aquel tiempo se ha conformado el territorio no elegido en el que se liberan las batallas del hoy y del mañana. Del pasado proceden las condiciones establecidas en las que nos hallamos. Durante ese tiempo que ya no nos pertenece el mundo se fue configurando y reificando, nos fue enajenado y se nos enfrenta, invertido, como una fuerza inercial que nos es extraña y a menudo muy adversa. Del pasado procede el peso de los antepasados muertos, ese que pesa como una pesadilla sobre el cerebro de los vivos, como dijera alguna vez Marx. Sin embargo, también del pasado procede a menudo la promesa no cumplida, la fuerza mesiánica de la que cada generación ha de hacerse cargo a fin de redimir a nuestros muertos, esos que no podrán jamás permanecer de pie si este enemigo que vence no deja de vencer.” (Alejandra Ciriza, “Intervenciones sobre ciudadanía de mujeres, política y memoria. Perspectivas Subalternas”, 2008).

Cuando las leyes son letra muerta

El derrotero de las políticas públicas relacionadas con los pueblos originarios ha divagado intrascendentemente por años. Este proceso se inauguró en el año 1985, cuando el Estado Argentino, bajo las presiones internacionales, creó el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) a partir de la Ley 23.302. Luego de cuatro años, esa Ley fue reglamentada a partir del decreto 155/89. Según estas normativas y sus disposiciones, el Instituto debería cumplir todas las actividades conducentes a promover el desarrollo integral de las comunidades indígenas adjudicando prioridad a sus aspectos socioeconómicos, sanitarios y culturales, preservando y revalorizando el patrimonio cultural de estas comunidades.
La mitad de la primera década, desde que se creó la institución y bajo la primera gobernación de Carlos Menem, el INAI estuvo sin funcionar, por falta de designación de autoridades y demora en su implementación. Desde las organizaciones indígenas se escucharon las voces de reclamo por un organismo que estaba muy lejos de lo que proponía y era ajeno a las comunidades.
En el año 2006, durante la presidencia de Néstor Kirchner, se sancionó la Ley Nº 26.160, que declara por el término de cuatro años la emergencia en materia de posesión y propiedad de las tierras ocupadas por las comunidades indígenas, suspendiendo todo proceso tendiente a desalojarlas, y ordena la realización de un Relevamiento Técnico, Jurídico y Catastral de esas tierras, que debía realizarse en un plazo de tres años. Para tal fin, se creó un fondo de 30 millones de pesos (10 millones por cada año que se suponía iba a durar el relevamiento) a los efectos de la aplicación de la ley, y se estableció que sería el INAI quien se encargaría de llevar a cabo dicho proceso.
A fines del año 2009, como los plazos no habían sido cumplidos, una nueva ley, la 26.554, prorrogó la suspensión de desalojos y la realización del relevamiento hasta el 23 de noviembre de 2013, y destinó 10 millones de pesos adicionales por cada uno de los tres años posteriores a su sanción. En 2013, con la sanción de la ley 26.894, se determinó que la norma operará hasta noviembre de 2017.
Pero la realidad es que hasta la fecha los fondos han sido dilapidados y el relevamiento está detenido. Mientras esto sucedía en los papeles, en la realidad se daban represiones y desalojos de distintas comunidades a lo largo de todo el territorio.

La lucha y la resistencia

El 14 de febrero de 2015, año de elección nacional, los pueblos originarios congregados en la organización QOPIWINI (Comunidades Qom, Pilagá, Wichí y Nivaclé) acamparon durante diez meses en pleno centro de Buenos Aires. El diálogo con el gobierno nacional, bajo la presidencia de Cristina Fernández, fue casi nulo.  Los medios más importantes de comunicación, afines a los intereses de los poderosos, fueron cómplices de la estrategia de invisibilización que los gobiernos, tanto provincial como nacional, llevaron a cabo para no dejar ver en su totalidad la complejidad de la lucha por la vida, la tierra, el agua, la educación, la salud y la justicia de los/as indígenas.
En medio de campañas políticas, el acampe QOPIWINI recibió y aceptó dialogar con Mauricio Macri, actual presidente del país, elegido en las elecciones de octubre de ese año. En diciembre, el encuentro y acercamiento entre el funcionario con Félix Díaz (referente qom) derivó en una propuesta de diálogo sobre la intervención del INAI. En primera instancia se anunció que la institución pasaba a formar parte de la Secretaría de DDHH y Pluralismo Cultural de la Nación y se propuso una mesa de trabajo compartida entre funcionarios del gobierno nacional y representantes de los pueblos originarios. Luego de esto el acampe se levantó con el compromiso de que serían atendidos los pedidos de las comunidades.
En este contexto el 17, 18 y 19 de febrero de 2016, en Burzaco, Buenos Aires, se reunieron representantes de las distintas comunidades del país en la Asamblea General Ordinaria de los Pueblos Originarios del Territorio de la República Argentina. El espacio concluyó con la propuesta de la Mesa de Trabajo y Diálogo Político de los Pueblos Indígenas de Argentina y el Estado Nacional.
El 14 de marzo de 2016, las comunidades decidieron acampar en las instalaciones de la ex ESMA (en la actualidad Espacio de la Memoria y Derechos Humanos, donde funciona la Secretaría de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural) para exigir que se respete el pedido de la Asamblea. El 16 de marzo intentaron desalojarlos, alegando una supuesta amenaza de bomba, pretendiendo que abandonen las instalaciones y regresen a sus territorios (hecho que se repitió durante los días siguientes).
Finalmente, el 23 de marzo levantaron el acampe con la propuesta del Secretario de Derechos Humanos y Pluralidad Cultural, Claudio Avruj, de emitir el decreto que institucionalice la Mesa de Diálogo Indígena con carácter vinculante. Ahora está vigente el plazo de veinte días para que los técnicos del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación y los técnicos de la Jefatura de Gabinete de Ministros evalúen y aprueben el decreto por.
El decreto cuya firma están esperando las comunidades otorga al Consejo la generación de condiciones para que se efectivice un diálogo intercultural, a fin de que las medidas legislativas y administrativas, que afectan directamente a los pueblos y comunidades indígenas, cuenten con su intervención previa; impulsar la reforma de la Ley N° 23.302, (que reglamenta toda intervención del Estado en los asuntos indígenas), adecuándola a los estándares internacionales; proponer un proyecto de reglamentación del derecho a la consulta previa, libre e informada; fortalecer la identidad sociocultural y el autogobierno; impulsar el relevamiento y ordenamiento del territorio para la efectiva posesión de las tierras por las comunidades. (Néstor Vilca, "Decreto que firmaría el presidente para los pueblos originarios", 2016).
¿Un gobierno perpetrador del más salvaje neoliberalismo, conquistado por los intereses extranjeros (norteamericanos) que se muestra sumiso ante las multinacionales será quien ponga la tierra en manos de quienes la habitan ancestralmente, la cuidan y la trabajan? ¿Será capaz de no dejarse seducir por el oro líquido o por el oro negro que corre debajo de los territorios de las comunidades? Nada más contradictorio a un gobierno de pueblos indígenas que fundan sus decisiones en el derecho a la consulta que un gobierno de derecha que gobierna con el poder unilateral del decreto de necesidad y urgencia.

El modelo extractivista

El desarrollo del modelo extractivista pone en los calendarios de nuestra América la incansable lucha contra el colonialismo. La industria minera y el agronegocio son proyectos multinacionales de devastadora envergadura. A través de inversiones impensables para países como el nuestro estas empresas extranjeras llegan y a muy bajo costo compran terrenos fiscales y no fiscales para llevar a cabo sus tareas productivas.
La flexibilidad legislativa y las condiciones sociales y económicas de los pueblos favorecen el escenario para los intereses de los poderosos. La inserción de proyectos agropecuarios e industrias extractivas en todo el territorio nacional, así como la cesión de tierras indígenas a particulares o instituciones, son las principales consecuencias de un modelo económico que avanza indiscriminadamente y arremete de manera verticalista sobre la democracia y los derechos de las comunidades.
El primer relevamiento de Amnistía Internacional sobre conflictos territoriales en Argentina dice que existen alrededor de 9,3 millones de hectáreas de campesinos/as e indígenas en los cuales se registraron hasta el momento 857 casos en conflicto. El 32% de los casos se trata de pueblos indígenas. Esto ha dejado el saldo de más de 10 autoridades indígenas muertas por enfrentar al modelo extractivista, centenares de procesados y comunidades hacinadas producto de la reducción territorial, muerte de niños indígenas por desnutrición o enfermedades supuestamente erradicadas. Ejemplos de ello son la resistencia del Pueblo Mapuche en Neuquén contra la instalación de las petrolera YPF y Chevrón; la comunidad Pilagá contra la multinacional Techin y el gasoducto que amenaza con dividir su terreno.
La crudeza del genocidio de siglos anteriores sigue avanzando sobre los pueblos en lucha. La historia de la resistencia va marcando el camino a las generaciones posteriores. En contra de lo que la mayoría de la sociedad argentina cree, la diversidad étnica ocupa un importante porcentaje del territorio. La información de circulación masiva no representa en nada la realidad de los conflictos campesinos e indígenas que se han desencadenado en las últimas décadas. Aun existiendo leyes que los protegen contra el desalojo y la ocupación privada, los derechos de los pueblos indígenas siguen siendo violados bajo formas de represión directa e indirecta, muertes, persecuciones políticas, abandono estatal sobre las condiciones sanitarias y una sistemática violencia institucional que invisibiliza y niega la existencia ancestral de los pueblos indígenas de Argentina.
A pesar de todo, los pueblos siguen caminando tras las huellas de sus antepasados, trazando redes de unidad y construyendo mundos donde quepan todos los mundos. Como dijera en México el subcomandante Marcos. “La lucha de cualquiera de los Pueblos es la lucha de todos nosotros, somos frutos de una misma planta y nuestras raíces están prendidas a la tierra por la sangre de nuestros abuelos y las manos de nuestros hijos, esto renueva la esperanza de seguir viviendo, haremos escuchar nuestra voz para que abran sus corazones.”  

lunes, 18 de abril de 2016

EL INJUSTO ORDEN INTERNACIONAL Y LA CRISIS ALIMENTARIA


Hay varias muestras del actual fracaso del modelo económico y financiero mundial, tal vez la más importante y menos abordada es la “crisis alimentaria”. Aun cuando este modelo muestra cifras favorables en el incremento de producción de alimentos generados de la intensificación de los monocultivos, la propia FAO reconoce que el crecimiento económico no es suficiente para acelerar la reducción del hambre y la malnutrición (FAO, 2012).
El aumento del hambre en el mundo se incrementa día a día, los países emergentes tampoco se salvan de esta situación, porque el hambre es también resultado de las inequidades en la distribución de la riqueza, lo cual en estos países se va incrementando. Son especialmente estos países que vienen ciñéndose obedientemente a las políticas de liberalización económica implantadas por la OMC a nivel global, provocando la crisis en el sector agrario, la mercantilización de los alimentos y la inseguridad alimentaria.
La liberalización de los mercados a nivel global, ha incluido también a la agricultura de manera que se puede comercializar los alimentos en cualquier parte del mundo y priorizar su producción en los lugares que posibilitan producir a menor costo, lo que provoca también impactos en la distribución del trabajo a nivel mundial. EHNE Bizkaia, organización de la Vía Campesina, nos muestra cifras reveladoras; así un cerealista que produce 1.500 toneladas utilizando tecnología de punta en Europa o América del Norte, se enfrenta con el agricultor africano que apenas produce dos toneladas. Del mismo modo, se contraponen, la agricultura en los países ricos que recibe 360.000 millones en subsidios de sus estados, frente a la agricultura de los países pobres que no reciben ayuda. Se enfrentan también los 28 millones de campesinos y campesinas que trabajan la tierra con tractores, frente a los 250 millones que lo hacen con ganado. (EHNE, 2012.)
Por otro lado, el impulso de la producción de agrocombustibles e industria de carburantes como los explica Efren Areskurrinaga, ha permitido que las grandes transnacionales de los países ricos de la OCDE se beneficien con las inversiones en alimentos, lo que a su vez ha contribuido a elevar la demanda de los precios de los alimentos, encareciendo su producción y además desviando el fin de la actividad agraria que es la producción de alimentos, y no de combustibles.

Movimiento Internacional Vía Campesina. Foto: Erika Chávez
Por su parte, la Vía Campesina, como uno de los movimientos emancipadores de mayor representatividad a nivel global, considera que esta crisis alimentaria no se debe a la capacidad productiva del sector agrario, esta crisis viene siendo provocada principalmente por factores de especulación y acaparamiento de alimentos en las que las transnacionales tienen gran parte la responsabilidad, lo que viene generando “injusticias globales”, en las que algunas personas comen demasiado, mientras que otras no tienen dinero para adquirir los alimentos adecuados, y/o carecen de tierras donde producirlos, y fomentan políticas nefastas como la promoción de los agrocombustibles que orientan la producción agrícola a la alimentación de automóviles y no de las personas. (Vía Campesina, 2011)
En este contexto, el rol de la OMC es cuestionable y “devastador”, como lo dicen los campesinos del mundo reunidos en la Vía Campesina, ya que la agricultura que la OMC promueve a través de sus políticas es la “agricultura especializada, industrial intensiva, orientada a la exportación”, con prácticas que alteran el equilibrio ecológico ambiental. La OMC solo ve los alimentos como una mercancía, y al mundo como un mercado que demanda cantidades homogéneas en gusto y sabor de alimentos, negando así el derecho a la alimentación a alrededor de 1.000 millones de personas que pasan hambre, de los cuales dos tercios son campesinos y campesinas. El hecho es que, bajo las leyes de este sistema, los alimentos se desplazan, dentro de la economía global, de las áreas de pobreza y hambre, a las áreas de dinero y abundancia.  (Vía Campesina, 2011)
En efecto, estas políticas neoliberales de la OMC, vienen devastando la principal fuente de generación de alimentos que es la agricultura en pequeña y mediana escala, así como la agricultura familiar, que por siglos ha sostenido la alimentación de los pueblos. La agricultura indígena/campesina cada vez se ve amenazada por el predominio de las tierras que el agronegocio viene acaparando, controlando la mayoría de las tierras arables y de mejor calidad; y consumiendo irracionalmente los recursos como el agua. Por este fenómeno impulsado desde los años 80 con las políticas neoliberales, hoy en día la agricultura de pequeña escala controla menos de la mitad de las tierras agrarias, sin embargo produce gracias al trabajo de los campesinos y campesinas el 70% de los alimentos consumidos a nivel mundial.
Es más, el rol que desempeña el sector agrícola en los países del Sur es fundamental, la agricultura tiene un peso muy alto en la actividad económica de estos países y supone la principal ocupación de la fuerza de trabajo, además de ser la principal actividad económica de divisas. Se tiene por ejemplo que la aportación que realiza el sector agrícola al PBI de las distintas economías del Sur, es mayor en aquellos países de menores ingresos como los países menos adelantados y es menor en los países de mayores ingresos.
La agricultura en los países del Sur se ha visto afectada por la globalización neoliberal, Arreskurrinaga señala dos procesos principales a los que los países pobres tuvieron que someterse. Primero, los programas de Ajuste Estructural y segundo, la liberalización comercial a través de los acuerdos de la Octava Ronda de Negociaciones del GATT (Ronda de Uruguay, 1986 a 1994).
Recordemos que para la negociación de las deudas externas, el FMI y el Banco Mundial, establecieron como condición el impulso del desarrollo a través del “crecimiento económico” en el marco de la liberalización de mercados. Lo que se pretendía era que los países deudores pudieran acumular divisas para pagar su deuda, esto impactó de manera negativa en la agricultura debido a que para alcanzar el equilibrio macroeconómico, estos países adoptaron un enfoque recesivo de contención de la demanda agregada, que se traduce en reducciones correspondientes del gasto público incluido el sector agrícola. Así mismo debido a la liberalización externa, estos países comienzan a priorizar la producción de productos agrícolas que tengan salida en los mercados internacionales frente al mercado interno, una clara orientación exportadora, ya que se tienen que obtener divisas para la deuda.  (ARRESKURRINAGA, 2008). De este modo la alimentación pasó a ser responsabilidad del comercio internacional de alimentos.
Por otro lado, el segundo aspecto que impacta en la agricultura a nivel mundial es la demanda que hacen los paises ricos para que la OMC tome acuerdos sobre Agricultura en las negociaciones comerciales internacionales, en el marco de la Ronda de Uruguay en 1986. Como se sabe años atrás en virtud de la “autosuficencia alimentaria” se impulsó la producción nacional de alimentos implantando barreras  a las importaciones de alimentos de los países del Sur, pero protegiendo con subsidios  su agricultura. El Sur no pudo aprovechar sus ventajas competitivas, haciendo de su gran dependencia de las exportaciones de materias primas un obstáculo casi insalvable para su desarrollo. De hecho, la competencia desleal en los mercados internacionales de los fuertemente subvencionados productos alimenticios del Norte condujo a reducir la producción local en muchos países del Sur y a incrementar su dependencia alimentaria, al tiempo que introducía hábitos de consumo occidentales mucho menos sostenibles que los autóctonos. (HEGOA).
Luego los países del Norte demandan la necesidad de liberar el sector, para que ellos con sus ventajas comparativas puedieran entrar libremente a los mercados de los paises del Sur y colocar sus productos agrícolas, atraves de los Tratados de Libre Comercio. Las medidas proteccionistas de los Estados de los paises ricos a su agricultura permitieron que se tenga excecentes agrícolas que luego se colocaron en los mercados internacionales a precios bajísimos, obviamente entrando en competencia con la producción local de los paises del Sur, condenando de este modo, como dice Arreskurrinaga, a las zonas rurales de estos países a un círculo viciosos de pobreza caracterizado por bajos precios agrícolas, bajos salarios y baja productividad.
Todas estas condiciones han hecho que se desarrolle un sistema alimentario mundial a base de la agricultura industrial la cual como se sabe, funciona mediante la conversión de petróleo en comida, produciendo en el proceso cantidades enormes de gases con efecto de invernadero. El uso de inmensas cantidades de fertilizantes químicos, la expansión de la industria de la carne, y la destrucción de las sabanas y bosques del mundo para producir mercancías agrícolas son en conjunto, responsables de por lo menos 30% de las emisiones de los gases que causan el cambio climático. (RAIN, 2009)
Por otro lado, la movilización de estas “mercancias alimentarias” por el mundo supone un proceso complejo de procesamiento, almacenamiento y congelación lo que genera pérdida considerales de energía fósil, que a su vez contribuye a agudizar la “crisis climática”. Con esto el actual sistema alimentario en manos de las transnacionales y con el respaldo de la OMC, que controlan la cadena alimentaria mundial y el comercio internacional de los alimentos, que mueve diariamente cantidades inmensas de dinero, podría ser responsable de cerca de la mitad de las emisiones de los gases con efecto invernadero.  (RAIN, 2009).
Frente a esto, diversos movimientos emancipadores en diferentes partes del mundo, vienen alertando y haciendo acciones de incidencia poltítica importantes para poner límites y transformar esta realidad. La Vía Campesina, como movimiento global plantea la Soberania Alimentaria como una propuesta que remplace este nefasto modelo corporativo y librecambista. Los campesinos del mundo amenazados por este sistema reclaman a los Estados la urgente emancipación de la OMC y la recuperación de su poder para tomar decisiones respecto a sus producciones locales de acuerdo a sus demandas internas, y no quedarse dependiendo de las leyes internacionales establecidas por la OMC las que favorecen unicamente a los países ricos.
Está demostrado que los sistemas industriales del agronegocio no son los más productivos, la Vía Campesina con esfuerzos propios ha levantado estudios en diferentes partes del mundo los que demuestran que las pequeñas fincas son más productivas que las grandes y los sistemas “agroecológicos”, “sostenibles” y/o “orgánicos” son tan productivos, y en muchos casos, más productivos que los monocultivos dependientes de insumos químicos, además los sistemas más productivos por unidad de área son los sistemas agroecológiocos, altamente integrados, que tiene la pequeña agricultura. (Vía Campesina, 2011)
Todo esto supone una mirada al pontencial del mundo rural, principalmente a los pueblos indígenas dedicados a la actividad agraria, supone reformas profundas, que fortalezcan el rol de las comunindades campesinas para que estas puedan seguir manteniendo sus tierras y recursos para producir alimentos en base a prácticas sostenibles.
 Articulo de .Erika Chávez Huamán Tomado de SERVINDI

miércoles, 6 de abril de 2016

EL SUICIDIO DE MUJERES EN LOS PUEBLOS AWAJUN Y KOKAMA DE LA AMAZONIA PERUANA


El suicidio de mujeres indígenas, por Daniel Sánchez
El suicidio constituye un problema de salud pública mundial que sobrepasa culturas y clases sociales. Sin embargo, dentro de la población indígena, y de manera preocupante en el caso de las mujeres jóvenes y adolescentes de los pueblos awajún (Amazonas) y kukama (Loreto), los intentos de suicidio se han acentuado en los últimos años.
Una investigación del Instituto Nacional de Salud Mental en la selva rural da cuenta de que casi la mitad de las mujeres encuestadas se siente insatisfecha por el nivel educativo y socioeconómico alcanzado. El 26% de ellas ha sentido alguna vez deseos de morir, frente al 7,5% manifestado por los hombres. Por su parte, un estudio de Unicef sugiere que entre los awajún el intento de suicidio es un mecanismo culturalmente asumido y de larga data como respuesta a los conflictos interpersonales. 
Ante esta compleja realidad, no cabe una explicación única, pues los motivos son múltiples y deben ser estudiados según las particularidades de cada pueblo indígena. Sin embargo, nuevos factores como el ingreso de actividades ilegales a sus tierras –tala, narcotráfico y trata de personas– o actividades extractivas sin la adecuada vigilancia ambiental y social vienen generando alteraciones profundas en el entorno social indígena y en el deterioro de las condiciones de vida de las mujeres.
La priorización de la mano de obra masculina (jornalero u obrero) es la más visible, aunque no la única, de las actitudes de exclusión de las mujeres. El reemplazo de la agricultura de subsistencia (labor que realizaban las mujeres) por una nueva economía de intercambio de bienes contribuye a restarles autonomía. 
Estos cambios, sumados a otros factores sociales y personales, como han señalado diversos especialistas, estarían produciendo cuadros severos de frustración que llevan a algunas mujeres a considerar insoportable su existencia. Por ejemplo, en una comunidad de El Cenepa, el responsable del centro de salud nos reportó que conoció por lo menos 50 casos de suicidio en años recientes. 
Ante ello, urge al Estado emprender reformas sustantivas que apunten a disminuir las brechas de desigualdad entre hombres y mujeres, a controlar los impactos sociales diferenciados y a tener alternativas dentro de las dinámicas productivas que permitan reducir la incertidumbre e inseguridad sobre el futuro de las mujeres. 
Todo esto debe estar acompañado por un nuevo enfoque en la intervención del sector salud para atender los casos de intentos de suicidio, pues no existe, en la actualidad, ningún tratamiento adecuado para ellas en los establecimientos de salud de las comunidades. Las postas no tienen personal especializado y con competencias interculturales que permita centrar la atención no solo en el comportamiento emocional individual, sino en la identificación de otros factores de riesgo sociales, simbólicos y culturales subyacentes.
La experiencia demuestra que, en contextos culturales diferentes, enviar psicólogos a la zona con enfoques de salud mental tradicionales no ha surtido efecto para resolver una problemática que involucra otros aspectos del propio entramado cultural.
En este contexto, es incomprensible que ante las graves condiciones de salud –física y mental– que enfrentan los pueblos indígenas el Poder Ejecutivo continúe postergando –desde hace 18 meses– la aprobación de la política de salud intercultural. No cabe duda de que esta medida contribuirá a examinar con seriedad y rigor el servicio de salud brindado a fin de hacer los correctivos necesarios para enfrentar esta penosa realidad y vislumbrar nuevas formas de atención que eviten el suicidio de más mujeres indígenas. 

ESTADO DE EXCEPCION DE FACTO EN TIERRAS MAPUCHES CHILE


Militarización del territorio mapuche



1.- Como Movimiento Social por la Recuperación del Agua y la Vida integrado por organizaciones socioambientales de todo el país, manifestamos nuestra indignación y honda preocupación por lo que está pasando con nuestros amigos y hermanos de la nación mapuche, de las cuales muchas organizaciones integran este movimiento.
2-. Denunciamos que en Wallmapu existe un Estado de Excepción de facto, que redunda en acoso policial, criminalización y abuso de las autoridades, en zonas como Arauco-Tirúa, Lanco, Malleco, Alto Biobio, entre otras. Las comunidades están permanentemente asediadas por sobrevuelos de helicópteros del Ejército de Chile y de vehículos blindados de guerra del GOPE que recorren los caminos del territorio, realizando controles de identidad irregulares, allanando domicilios, haciendo montajes e incluso encarcelando a autoridades ancestrales en detenciones y procesos irregulares y excepcionales que se han vuelto la regla en la zona.
3. Las últimas semanas se ha intensificado la situación, han detenido a integrantes del Movimiento cuando desarrollaban labores comunicacionales y de fiscalización activa de la vulneración de derechos que se vive en el territorio. Funcionarios policiales descienden de vehículos hasta con ametralladora uzi, emboscando a miembros del Parlamento de Koz Koz, haciendo controles ilegales de identidad a integrantes del Colectivo Mapuexpress, o también haciendo detenciones arbitrarias en la escuela de Pailahueque a diversas personas de la comunidad de Ercilla, incluyendo al reportero gráfico Camilo Tapia quien denunció que fue asfixiado por efectivos del GOPE y que le rompieron sus herramientas de trabajo, o la detención del fotógrafo Felipe Durán a quien se le acusa de porte ilegal de armas y se mantiene en prisión preventiva mientras se mantiene la investigación de la Fiscalía. Esto da cuenta de un hostigamiento policial que busca amedrentar a quienes evidencian el Estado de Guerra de baja intensidad que se vive en Wallmapu.
4.- Denunciamos que esta fórmula de acoso al pueblo mapuche, liderada por el Ministro del Interior Jorge Burgos, solo pretende profundizar el extractivismo en el Wallmapu para lucrar con la tierra, el agua, el aire, los bienes comunes y la vida en general. Empresas forestales, agroindustriales, pisciculturas, hidroeléctricas, salmonicultura e incluso mineras, presionan al gobierno para disponer de facilidades y profundizar la conflictividad. Vemos con alarma que se ha iniciado un nuevo período de criminalización a las comunidades que luchan por el territorio, el agua y el derecho a defender sus vidas, en la misma senda criminal que enluta a Colombia, Honduras, Guatemala y otros lugares donde la vida le disputa terreno a la cultura de muerte que nos quieren imponer.
5.- Las más de 80 colectividades y organizaciones que integran el Movimiento hace una interpelación al Gobierno de Chile a respetar la serie de convenios y leyes que reconocen los derechos de los pueblos, pero sobre todo, exhortamos a la sociedad chilena a escuchar y aprender de la lucha del pueblo nación mapuche, del vínculo que establecen con la naturaleza y con su entorno, y de la comprensión de que no somos dueños de la vida, sino parte de ella.
6. En este contexto, con más fuerza que nunca llamamos a acompañar, asistir y solidarizar con la IV Marcha Plurinacional por la Defensa de las Aguas y los Territorios, que está convocada en Temuco el 23 de abril, demostrando colectivamente y en el espacio público que repudiamos esta forma de operar y que reivindicamos la necesidad de optar por otros modelos de desarrollo que reconozcan en la autonomía y la creación. Tal como años anteriores, será un carnaval de vida, alegría y propuestas.
Movimiento Social por la Recuperación y Defensa del Agua y la Vida

lunes, 4 de abril de 2016

EL DILUVIO SEGUN LA TRADICION DEL PUEBLO SHIPIBO AMAZONIA PERU



   

Los Shipibo-Conibo forman uno de los grupos indígenas del oriente peruano. Hay dos comunidades que se han mezclado entre si: los Shetebo que antiguamente vivían debajo de Contamana, ahora se encuentran integrados a los Shipibos. La población alcanza unas 25,000 personas repartidas entre 108 caseríos o comunidades nativas. Para explicar los orígenes de los humanos, los Shipibo relatan el siguiente mito, que fue tomado de la página web Mundo Shipibo-Conibo:
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Tiempo atrás apareció al borde del rió Soaya un hombre joven con escamas brillantes. Su piel era clara como un espejo, sus flechas eran de oro y su canoa roja como la sangre. El joven amarró su canoa a un árbol de limón y sujetó una campana de oro a la rama más alta. Cada mañana tocaba la campana y se iba de pesca, regresando con muchos peces que compartía generosamente con los Shipibo.

Por su lado los hombres Shipibo regresaban de la pesca con las manos vacías. Sus mujeres se burlaban de ellos diciendo: ¿Por qué ustedes no pueden traer abundante pescado como el extranjero? Celosos de su exito los hombres decidieron matar al joven, enterrándolo vivo. Un dia, toda la gente salia del pueblo para pescar, menos una pareja que se quedó porque la mujer pensaba que iba a dar a luz. Al constatar su error, ellos corrieron por la playa para alcanzar a los demás cuando los sorprendieron unos gritos desesperados: descubrieron al joven de la tunica brillante enterrado hasta el cuello en el barro resbaloso.
'Déjalo allí', dijo la mujer, pero su esposo decidió rescatarlo. El extranjero, muy agradecido por obtener su libertad, les dijo: ‘regresen ustedes rápido a su casa y suban al árbol genipa, porque el viento vendrá del norte y otro vendrá del sur, y las lluvias no van a cesar hasta que las montañas, los árboles, los animales y todos los seres humanos hayan desaparecido de la tierra'. Diciendo estas palabras el hombre se tiró al agua y no se le vio nunca más. La pareja trato de advertir a sus parientes del desastre inminente, pero ellos estaban tomando masato y no quisieron escuchar.

Tres días más tarde, hubo un eclipse total de sol y el mundo se puso en tinieblas. Una lluvia torrencial empezó a caer, con truenos y relámpagos. Granizos de un tamaño nunca antes visto cayeron del cielo. La pareja subió al árbol del genipa como había indicado el joven. Muy pronto el agua sumergió a todas las casas, las plantas los animales y los seres humanos en el diluvio. Las aguas subieron más y más, inundando los árboles del bosque. Pero la genipa siguió creciendo tal como un hongo desmesurado.
Cuando finalmente cesó la lluvia, el hombre empezó a bajar del árbol, cuidadosamente de rama en rama. Para probar la solidez del suelo, tiró los frutos de la genipa. El primer fruto cayó en el agua, el segundo se cayó en el barro. El tercer fruto cayó sobre tierra firme. El hombre pudo bajar por fin del árbol. Miró alrededor, pero no vio nada. El pueblo entero había desaparecido y en su lugar había una cocha grande.

El hombre llamaba y llamaba, pero nadie contestaba. Caminaba de un lado a otro sin encontrar a nadie. Al regresar al árbol genipa tuvo la sorpresa de encontrar tres grandes ceramios pintados colmados de yuca, carne asada y masato. Después de comer a gusto, el hombre se fue de nuevo en busca de otros seres humanos. Al regresar volvió a encontrar los tres platos llenos de alimentos. Decidió esconderse detrás de la genipa para descubrir quienes estaban trayendo los regalos. Y después de corto tiempo, vio aproximarse por la cocha una canoa manejada por dos hermosas mujeres. El primer impulso del hombre fue agarrar a la primera mujer. ¡Suéltame! grito la primera mujer, ¡yo no soy para ti ! pero el hombre no hizo caso y la tomo por la fuerza. Como resultado de aquella unión imprevista, nacieron de entre los dedos de los pies de la mujer, seres humanos diminutos para repoblar el mundo. ¡Idiota!, dijo la mujer, ‘mi acompañante, que es hija del inca, iba a ser tu esposa. Yo solamente soy su sirvienta. ¡Cometiste un error imperdonable!
La historia trata de la destrucción por inundación del tercer mundo y el inicio del presente, el cuarto mundo. El primer mundo fue destruido por un incendio y el segundo reventó cuando el cielo cayó sobre la tierra. Al inicio de cada recreación de los seres humanos emergían al mundo siguiente por una escalera invisible. Se cree que el mundo presente tiene que desaparecer muy pronto, pero que la humanidad reaparecerá en el mundo siguiente. Su concepto del mundo no es lineal sino cíclico donde los opuestos se concilian y la destrucción la vida y la muerte, el verano y el invierno, el dia y la noche lo bueno y lo malo.
El árbol de genipa simboliza al árbol cósmico. Todos los frutos cuelgan del árbol y, en otras versiones, cuando se tira el tercer fruto al suelo, éste revienta derramando muchas semillas sobre la tierra. Cultivos como el pimentón, la calabaza y la yuca brotaron debajo del arbol, la genipa simboliza también la escalera invisible que reúne la tierra con el cielo. Los espíritus tienen que bajar por ella para renacer en nuestro mundo. Por estar razón los niños que han de repoblar el mundo tienen que nacer debajo del árbol cósmico.
Después del diluvio, el río sagrado se convirtió en el laberinto de canales y lagunas que caracterizan la Amazonas de hoy. Los conibo creen que su lugar de emergencia en el mundo presente fue Cumancaya y no Soaya. Cuando el agua luce cristalina como un espejo, aun puede vislumbrar el reflejo del primer pueblo que desapareció debajo del diluvio.